Magda Nieves y un buen Shostakovich para empezar 2009

Dudamel, Magda Nieves, los príncipes de Asturias D. Felipe de Borbón y Dña. Leticia Ortiz, y el Dr. Abreu en la recepción tras interpretar la Segunda de Mahler en Oviedo con la Orquesta "Simón Bolívar" (Auditorio Príncipe Felipe, Oviedo, jueves 23 de octubre de 2008). Foto propiedad de Magda Nieves (en Facebook).

Hoy nada más conectar el ordenador me llevé la gratísima sorpresa de recibir un e-mail de la soprano portorriqueña Magda Nieves, quien contactó a través de este blog y de Facebook, a raíz de la Segunda de Mahler con Dudamel y la Bolívar primero en el "Festival Casals" de Puerto Rico y luego el memorable de Oviedo con motivo de los "Premios Príncipe de Asturias" donde, personalmente, opinaba que su voz no brilló como era de esperar (máxime tras seguirla en sus actuaciones y escucharla en Internet: Aol, Kiraku y lo que es lo mismo, en YouTube®), pero siempre opinión personal, y quiero dejar aquí el excelente comentario que hace el profesor venezolano Einar Goyo Ponte en su blog a raíz del citado concierto de Puerto Rico.

Nuestro maestro Max Valdés, volverá a dirigirla en abril de este año en el concierto 9 de la Orquesta Sinfónica de Puerto Rico con el Gloria de Poulenc. También me he alegrado con un nuevo triunfo tras el estreno del Díptico de teatro criollo con la ópera Los Jíbaros de Manuel B. Gonzalez, sobre la obra de teatro Los jíbaros progresistas de Ramón Méndez Quiñones, en el Teatro "La Perla" de Ponce el pasado 17 de agosto pasado dentro del Festival Iberoamericano de las Artes de Puerto Rico -hermanándose con Venezuela-, bajo la batuta de Francisco "Paquitín" Figueroa, donde también ha participado la conocida en su país y televisiva soprano Hilda Ramos.

Sobre el concierto de la OSPA del Viernes que da título a la entrada (y con crítica de Diana Díaz en LNE que enlaza la entrada) añadir que fue de menos a más: ya la conferencia previa de Julio Ogas (quien también hizo los comentarios al programa ) fue excelente, amena, ilustrada, incluso "breve", y nos hacía "caer" a los pocos presentes (no llegamos a diez personas, incluyendo a Diana Díaz y a un servidor) en el paralelismo del desarrollo temático de Egmont de Beethoven con la Quinta de Shostakovich, añadiré personalmente las "penurias" políticas del ruso que fueron parecidas a las de Oskar Böhme, con lo que se "cerraba el círculo" de un programa "redondo". La obertura sufrió algunas entradas "desencajadas" en tempo entre viento y cuerda, para "torcerse" un poco menos en el Concierto para trompeta en Mi m. Op. 18 (enlazo con la versión en Fa) de Böhme donde brilló el valenciano Lluis González, profesor en la Musikene (como Isabel Urrutia) con un sonido dulce, redondo, y una calidad que lo harán triunfar donde quiera (su "propina" Weather bird homenaje a Satchmo fue una delicia). Finalmente, la ansiada Quinta de Shostakovich donde por fin la OSPA demostró con su plantilla (y con la colocación clásica de nuevo, sin permutar violas y cellos) en de lo que es capaz, y un tercer movimiento que hizo lucir en toda su capacidad nuestra primera formación orquestal, con un Yoav Talmi que supo "mandar" y lucir una obra con "mucho que dirigir", y todo ello de memoria.
Agradecerle el gran concierto que nos deparó, el primero del recién estrenado 2009, y que repetirá en Puerto Rico con "la otra sinfónica" de Max Valdés el 16 de mayo en el Concierto de abono 11 junto a la Leonora nº 3 de Beethoven y otra apuesta por una obra poco escuchada: Spaghetti Western (1998) del norteamericano Michael Daugherty.